Este signo para el cero fue utilizado por primera vez en la India, aunque posiblemente sea de influencia griega a través de la palabra Cero, «nada». Incluso pudiera ser que su origen estuviese en Alejandría, y que de allí pasase a la India.
Un hecho sorprendente es que este signo apareció, según los registros encontrados hasta este momento, casi dos siglos después que el resto de los signos numerales.
No fue este sin embargo el primer signo dedicado al cero. A comienzos de nuestra, siglos antes de que en la India se inventase el que usamos en la actualidad, los mayas ya utilizaban en su sistema de numeración vigesimal un signo para el cero: Cero. Unos dicen que se trata de un caracol. Otros, de un ojo semicerrado.

 Fuente: Struik, p.67; Boyer, p.277; A History of mathematical Notations, #68; web: www.astro-digital.com/1/mayas.htm